LA SUERTE DE ALAN GROSS. Por Manolo Pozo.
El presidente Obama ha estado clavado con situaciones que no ha resuelto, ¿qué ha hecho este presidente? Sumen y concluyan: No ha hecho nada en estos 6 años de maltratos a la nación. Para sombrear aún más... su lamentable tiempo de poder, existe la posibilidad de un desenlace trágico en el caso del contratista judío-americano Alan Gross. El señor ha escrito una carta de despedida y sus familiares presienten que le viene encima un mal tiempo al prisionero del castrismo.
Alan Gross
Hace unos días leí una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba en torno a la detención arbitraria del señor Gross, que cito textualmente:
"El gobierno cubano reitera su disposición a buscar, de conjunto con el gobierno norteamericano, una solución al caso del Sr. Gross, aceptable para ambas partes, que contemple las preocupaciones humanitarias de Cuba relacionadas con el caso de los tres cubanos del grupo de los Cinco, que continúan injustamente encarcelados en Estados Unidos por más de 15 años. Como es conocido, el Sr. Gross ha recibido un tratamiento digno y decoroso. Desde su detención, se encuentra recluido en un hospital, no porque su situación de salud lo requiera, sino porque allí se le garantiza atención especializada por parte de personal médico y de salud altamente calificado..."
La nota no pudo evitar la desvergüenza de descubrir el propósito de la encarcelación de Alan Gross, su arresto a todas luces en diciembre de 2009, fue otra maniobra mezquina de la seguridad cubana con la intensión de obligar un canje que dejara libre a los espías criminales de la Red Avispa, sentenciados en cárceles de EU. Ahora -como siempre- el mundo disculpa al régimen de La Habana e incluso 300 religiosos estadounidenses culpan a Washington de su permanencia en prisión argumentando que "Alan fue a Cuba en nombre del gobierno Americano".
Sin dudas la operación Gross le ha salido muy mal a la dictadura, estamos seguros de que Fidel Castro apostó su vida a que lograría la libertad inmediata una vez apresado el activista judío. Pero no fue así, Fidel Castro se deterioró tanto que ha estado al punto de la muerte; eso no le ha permitido ser enérgico en la influencia internacional que podía ejercer en esta negociación. Por otro lado la culpabilidad de los 5 Espías es tan evidente y demostrativa que las voces por sus libertades se han limitado a un canto que se esparce pronto....Ni el mismo presidente Obama encuentra formas para liberarlos.
Alan Gross corre peligro de muerte, se dictamina pérdida de un ojo y la muerte de su madre, Evelyn Gross, el pasado 18 de junio en Texas lo mantiene en una depresión crítica añadiendo que se le prohibió ir al sepelio. Sé lo que es tirarse a morir en una prisión, en algunos hombres la cárcel nunca llega a mentalizarse y esto puede llevar al codenado a estados críticos de salud mental, mucho más cuando no se acepta la razón del encierro.
Es responsabilidad de la Casa Blanca ser contundente en este caso de vida o muerte de uno de sus ciudadanos utilizado por la tiranía castrista. No se entiende que en medio de este atropello la Casa Blanca se mantenga negociando con los Castro, abriéndoles puertas hacia el territorio nacional e invitando a las gentuzas del comunismo a tomar espacios peligrosos en norteamerica.
El presidente Barack Hussein Obama debe reclamar sin condiciones la libertad del contratista Alan Gross. La comunidad judía también debe hacer los mismo, comenzando por los judíos que viven en privilegio en La Habana. El gran y único culpable de esta vendetta es el régimen de los Castro. No debe mediar ninguna negociación para que el señor Gross retorne inmediatamente a su casa.. Gerardo Hernández, Ramón Labeñino y Antonio Guerrero (los espías) han sido confesos de un crimen que deben pagar y de ninguna manera pueden ser canjeado por un inocente atrapado por la injusticia castrista.
montero_manolo@ymail.com
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