OTROS CLOSETS. Por Manolo Pozo.
Todos andan buscando asientos y tribunas. No pocos visualizan más allà del horizonte.
No hay nada oficial y mucho menos libertad garantizada para los cubanos en estas veladas negociaciones, que ya se aplauden sin abrirse las celdas y con la misma represión de siempre.
Lo que sì se abren son los closets y no salen precisamente gays de sus interiores, ahora los que permanecían camuflados se descubren y los que aparentemente defendían el mantenimiento... embargo, de pronto quieren que el pueblo empiece a comer sin él, y sobran aquellos que confirman que si no pasò nada en 56 años, esta vez sí cambiará todo porque los cubanos tendrán la oportunidad de ver una apertura gloriosa, negociada entre Obama y Castro. Según estos incondicionales la economía se encargará de debilitar al régimen, pero nunca exponen dónde quedará la libertad y la dignidad de los nuestros en este proceso. Como siempre imaginamos, el exilio brilla por su ausencia, el primer exterminador del destierro se llama presidente Obama, para este tipo no contamos en el futuro planificado, tampoco para los reunidos en la Sección de Intereses de La Habana. Ni unos ni otros calcularon esa posibilidad. Se sabe que no iríamos a un diálogo perverso, pero lo honesto hubiera sido que algunos o todos los disidentes invitados rechazaran la asistencia a esta reunión -excluyente- para seleccionar quienes entran o no en la componenda oficial entre ambos gobiernos; lo digno quedó a un lado cuando se ingnoró totalmente la opinión y presencia del exilio, como parte indivisible de la nación.
Fuimos muy importantes manteniendo a una disidencia que más vale ni cuestionar que hizo con todo el soporte económico que recibió y que no se atreve a reclamar nuestra existencia en la creación de una nación libre de verdad sin los Castro y sin Obama, no está en la agenda oficial esa posición.
Nada, que muchos seguiremos existiendo sin precios. Miles nos mantendremos en contra del levantamiento del embargo, aunque los del closet apoyen, lo aplaudan y se levante; eso no importará mucho, al final sabremos quiénes estaban dialogando en silencio, mintiendo en sus posiciones, faltándole a sus encierros y aunque el pueblo coma, beba y calce mejor, la libertad seguirá pendiente como la dignidad de los deshonestos de la historia.
montero_manolo@ymail.com
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