Cuba 2016. Por Jorge Hernández Fonseca. Diciembre de 2015. [Este Artículo tiene 2 Comentarios].
La decisión norteamericana de establecer relaciones diplomáticas con Cuba parece objetivar el asegurar estabilidad en un país cerca de sus costas y como forma de jerarquizar sus intereses geoestratégicos.
Esto ha concitado la aprobación casi unánime del resto del mundo, lo cual no significa que los cubanos que sufren la dictadura "beneficiada", tengan también que aceptarlo. Lo anterior indica que la "estabilidad" dentro de la isla depende de factores no necesariamente al alcance de las medidas norteamericanas de acercamiento al castrismo, entre los cuales podemos destacar básicamente tres:
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Primero, las postergadas y "desestabilizadoras" ansias de libertad de los cubanos dentro de la isla (que se pronuncian en Centroamérica "votando" con los pies);
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En segundo lugar, la poca cooperación de la dictadura, que todavía no se ha movido lo suficiente para permitir una mejora material de su pueblo ampliando el potencial económico de su población interna; y
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En tercer lugar, el copioso subsidio venezolano pronto a desaparecer.
Los tres factores antes enumerados tienen una fuerte relación entre ellos. La desaparición del subsidio petrolero venezolano incentivaría medidas dentro de Cuba en sentido de ampliar el abanico de negocios permitidos a los cubanos de dentro y fuera de la isla. Esto a su vez podría potenciar las posibilidades "liberadoras" de los cubanos, razón por la cual el castrismo se niega a llevarlos a la práctica, lo que pudiera, internamente, incentivar acciones desesperadas y "desestabilizadoras". Esta trilogía será la clave dentro de Cuba durante el próximo año 2016. El escenario más probable es que durante 2016 desaparezca el subsidio petrolero venezolano al castrismo y que la dictadura se enquiste en su posición actual de no ceder libertades --ni siquiera económicas-- al interior de la isla. Habría que ver la reacción norteamericana -- así como la reacción del pueblo cubano dentro de Cuba-- ante semejantes hechos. En paralelo pueden sumarse otros elementos fortuitos, como la muerte del dictador mayor, o incluso del gobernante actual, todo lo cual pudiera condimentar adicionalmente los factores desestabilizadores dentro de la isla. ¿Estará dispuesta la administración de Raúl Castro a dictar medidas de cambios reales ante el corte del subsidio venezolano? ¿Habrá reacciones militares internas ante la muerte de alguno (o de ambos) hermanos Castro? ¿Intervendrá EUA dentro de Cuba si se sucede un proceso desestabilizador de grandes proporciones? Son preguntas obligadas ante circunstancias como la que sin dudas Cuba enfrentara en el venidero año. La generalizada decisión de los cubanos dentro de la isla para solucionar individualmente sus problemas emigrando, parece mostrar las pocas posibilidades para el inicio de un proceso desestabilizador basado en el descontento popular. Sin embargo, la situación pudiera cambiar drásticamente si se cortara abruptamente el subsidio venezolano y la dictadura no respondiera con medidas adecuadas de liberalización --que por otra parte-- les harían perder poder. Así, el año 2016 augura para Cuba cambios sustanciales obedeciendo a la ola democratizadora que llegó a Venezuela desde Argentina barriendo el castro-chavismo. La gran pregunta para los demócratas cubanos es: ¿estará EUA a la altura del momento democratizador latinoamericano?.
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2 COMENTARIOS:
#1- José Vilasuso Rivero: "No podemos adivinar lo que cualquier país haga ante esos cambios inevitables que se avecinan a paso de carga. De manera complementaria la postura indiscutible es el fortalecimiento de la cubanía y por ende la democracia. Pertenecemos a una cultura y nada ni nadie lo puede cambiar. Las culturas no se cambian como la ropa usada. Tamaño fue el error capital de los Castro, seguido en menor escala por Chávez, y ahora sin líderes el edificio se viene al piso. Es inevitable, fallaron irremisiblemente. A la ola creciente se integran factores cada día más viables dados los progresos alcanzados entre cubanos de la diáspora y la isla, amén del poderío económico creciente detentado por los primeros. Parejamente no es menos cierto que el desplome tercermundista regional está abriendo brechas a nuevas posibilidades de comprensión y solidaridad general con los demócratas criollos, no importan sus ideas, ni ubicación. Tras las relaciones USA CUBA se acaba de abrir una compuerta repleta de incógnitas para muchos que, a nosotros nos beneficia superlativamente pues el peor adversario de la causa democrática se llama el silencio e indiferencia padecidos desde los primeros años sesenta. Ahora bien, los espacios recién abiertos requieren medios efectivos que penetren una inmensa audiencia que comienza en el suelo patrio y se debe extender desde La Patagonia hasta el Polo Norte. Este elemento nos falta y es urgente su activamiento. No debe aplazarse la introducción de medios, los que sean, para hacer contacto inteligente con el pueblo; hay que informarlos incluso de realidades internas que desconocen como efecto de la censura. Otro resultado positivo de los lazos con USA es la conciencia colectiva de que ellos, los del patio, ya no están solos. Componente grande y sustancial de una situación emergente. Todo empeño pues dirigido a comunicarse con el terruño y los que lo moran es de inapreciable peso. En esa dirección vamos y no veo obstáculo significativo que afloje los enganches
#2- José Vilasuso Rivero:"No podemos adivinar lo que cualquier país haga ante esos cambios inevitables que se avecinan a paso de carga. De manera complementaria la postura indiscutible es el fortalecimiento de la cubanía y por ende la democracia. Pertenecemos a una cultura y nada ni nadie lo puede cambiar. Las culturas no se cambian como la ropa usada. Este fue el error capital de los Castro, seguido en menor escala por Chávez, y ahora sin líderes el edificio se viene al piso. Es inevitable, fallaron irremisiblemente. A la ola creciente se integran factores cada día más viables dados los progresos alcanzados entre cubanos de la diáspora y la isla, amén del poderío económico creciente detentado por los primeros. Parejamente no es menos cierto que el desplome tercermundista regional está abriendo brechas a nuevas posibilidades de comprensión y solidaridad general con los demócratas criollos, no importan sus ideas, ni ubicación. Tras las relaciones USA CUBA se acaba de abrir una compuerta repleta de incógnitas para muchos que, a nosotros nos beneficia superlativamente pues el peor adversario de la causa democrática se llama el silencio e indiferencia padecidos desde los primeros años sesenta. Ahora bien, los espacios recién abiertos requieren medios efectivos que penetren una inmensa audiencia que comienza en el suelo patrio y se debe extender hasta La Patagonia. Este elemento nos falta y es urgente su activamiento. No debe aplazarse la introducción de medios, los que sean, para hacer contacto inteligente con el pueblo; hay que informarlos incluso de realidades internas que desconocen como efecto de la censura. Otro resultado positivo de los lazos con USA es la conciencia colectiva de que ellos, los del patio, ya no están solos. Componente grande y sustancial de una situación emergente. Todo empeño pues dirigido a comunicarse con el t erruño y los que lo moran es de inapreciable peso. En esa dirección vamos y no veo obstáculo significativo que afloje los enganches."
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