Una fracasada cumbre entre protestas y cacerolazos. Por el Dr. Alberto Roteta Dorado.
Fort Pierce. Estados Unidos. Con la develación de una imponente escultura de bronce de 3,8 metros de altura dedicada a Hugo Chávez, en la Isla Margarita, la mayor de las tres islas del Estado de Nueva Esparta, en territorio insular venezolano, se continuaba dando la bienvenida a los participantes en la XVII Cumbre del Movimiento de los Países No Alineados (MNOAL), evento que se desarrolló entre el 13 y 18 de septiembre.
Unos 14 000 hombres de la seguridad nacional venezolana vigilaban armados a los 550 000 habitantes de la isla. El temor a las protestas populares que podían ocurrir en medio de la cita se apoderó del dictador Nicolás Maduro, quien al parecer, seleccionó el lugar para evadir las continuas manifestaciones en Caracas y otras importantes localidades venezolanas. No obstante, los pobladores dieron toques de cacerolas durante todas las noches de la cumbre a pesar de la militarización de las calles de la isla.
Mientras Maduro y los pocos jefes de estado y otros representantes de los países miembros se encargaban de intentar poner un posible orden mundial en medio del caos, el país protestó enérgicamente el pasado viernes - con una manifestación que la oposición llamó irónicamente “La Cumbre del Pueblo”- para exigir al Poder Electoral que controla el oficialismo que anuncie de una vez el siguiente paso para activar un referendo revocatorio presidencial, y al propio tiempo repudiar el encuentro diplomático.
A pesar de esto, estaba previsto que el encuentro centrara su atención en la promoción y defensa de la paz mundial, uno de los principios fundamentales del MNOAL, al menos su lema tan sui géneris lo sugería: “Unidos por el camino de la paz“, pero como era de esperarse – teniendo en cuenta sus principales protagonistas, entre los que se destacaron los mandatarios Raúl Castro, de Cuba, Rafael Correa, de Ecuador, Evo Morales, de Bolivia; Hasán Rohani, de Irán, y por supuesto Robert Mugabe de Zimbabue, entre otros,- los principios básicos que han de sustentar la paz mundial fueron dejados a un segundo plano para divagar en las particularidades de cada país con sus ambiciones, pretensiones y delirios.
Así las cosas, el presidente de Ecuador denunció los calificativos que el mundo les da al llamarlos autoritarios y dictadores, justificando sus actitudes en la supuesta idea de la imposición de ciertos lineamientos que llegan desde el norte. El canciller del país andino, Guillaume Long, recurrió al tema ecuatoriano de los paraísos fiscales como una de las grandes causas de un “sur global” y a su propuesta de Pacto Ético que trataría además en las Naciones Unidas; pero lo peor fue que insistió en el tema de los derechos humanos; aunque en su país se violen sobremanera aspectos como la libertad de expresión y pensamiento, e independientemente a que su gobierno lanzó a centenares de policías antimotines contra los migrantes cubanos que protestaban pacíficamente hace solo dos meses.
Su sentencia acerca de que “Cuba no renunciará a uno solo de sus principios”, demuestra la postura del presidente cubano Raúl Castro respecto a las negociaciones con el gobierno de Estados Unidos.
(Caricatura de Yoandy Carrazana cortesía para Cuba democracia y vida .org).
Por su parte el presidente cubano, Raúl Castro, con su limitada expresión acudió, una vez más, al ya trillado tema del bloqueo de Cuba por Estados Unidos, reafirmando su postura de exigencia sin ofrecer nada a cambio. Su sentencia acerca de que “Cuba no renunciará a uno solo de sus principios” así lo demuestra.
Su aliado en las andanzas socialistas, Evo Morales, retomó el clásico tema del capitalismo y el imperialismo como modos que no garantizan ni la vida, ni la humanidad, ni “la paz con solidaridad o soberanía para el desarrollo de los pueblos” y se refirió a conspiraciones permanentes de carácter político y económico, así como a agresiones o amenazas militares.
Un poco más coherente y limitado a los temas ejes de los objetivos del evento, el presidente de Irán, Hasán Rohani, insistió en las tendencias hacia una polarización militar que está superando a las pasadas carreras armamentistas, así como a los peligros del terrorismo de los grupos yihadistas, aunque resulte paradójico que alguien que dirige sendas operaciones experimentales nucleares, las que según el Organismo Internacional de Energía Atómica, tiene la finalidad de dotarse de un verdadero armamento nuclear y poner en peligro a la humanidad, aborde temas relacionados con la paz y el desarme.
El jefe de Estado de Corea del Norte, Kim Yong-Nam, intentó justificar su política nuclear a mediante la existencia de supuestas amenazas de Estados Unidos, a quien atacó por intentar mantener su dominación contra los países miembros del MNOAL. Por su parte el presidente anfitrión, Nicolás Maduro, no perdió la oportunidad para arremeter contra el gobierno de Barak Obama y de acusarle en su apoyo a la oposición. En la clausura se refirió al éxito de la cumbre como una victoria de la diplomacia bolivariana.
En fin, el evento reunió a un pequeño grupo de frustrados dictadores, cuyos fracasados gobiernos están en vías de extinción, los que no pudieron ofrecer ningún mensaje de utilidad y acudieron a sus ofensivas retóricas para enfrentar al eterno enemigo que como idea delirante está siempre presente.
Evo Morales, uno de los pocos presidentes participantes del continente Americano, se refirió a conspiraciones permanentes de carácter político y económico, así como a agresiones o amenazas militares.
FOTO DEBAJO (Caricatura de Yoandy Carrazana cortesía para Cuba democracia y vida .org).
El dictador de Corea del Norte, Kim Yong-nam, aseguró en la cumbre que su país es capaz de sostener la paz de la península y del mundo “aplastando cada acto de guerra por parte de los EE.UU”.
FOTO DEBAJO: (Caricatura de Yoandy Carrazana).
Con el paso del mando de la presidencia del MNOAL a Venezuela -algo que tiene lugar en momentos en que podría ser expulsada de Mercosur, y en que la OEA activó su Carta Democrática Interamericana como consecuencia de las denuncias de violaciones a los derechos humanos y la ausencia de democratización de su gobierno- se clausuró el pasado domingo el evento con la firma de una declaración de varios puntos, los que abarcan temas tan reiterados y manipulados por las tendencias de izquierda como: la necesidad de democratización y refundación del sistema de las Naciones Unidas, el fin del bloqueo a Cuba, la erradicación del terrorismo, la posible solución del pueblo palestino, entre otros puntos, en lo que han llamado Declaración de Margarita. La oposición criticó el evento que supone la inversión de entre 150 y 250 millones de dólares, algo que se hace en medio de la crisis económica que lleva al país al abismo y que el propio presidente ha declarado como estado de excepción y de emergencia económica, decreto que ha extendido por cuarta vez este 13 de septiembre por sesenta días más.
El domingo 19, la Mesa de la Unidad Democrática, en representación de la oposición venezolana, emitió un comunicado en el que se refirieron al fracaso del evento. Precisaron que apenas asistieron quince presidentes y tres decenas de delegaciones de una totalidad de 120 países miembros, con lo que se demuestra la crisis política del MNOAL y el estado de aislamiento en que va quedando Venezuela.
Esta cumbre se desarrolló en medio de un ambiente político muy desfavorable para el gobierno de Nicolás Maduro. Las múltiples acciones de protesta protagonizadas por la oposición en los últimos días y que alcanzara su clímax con la histórica “toma de Caracas” demuestran la fuerza de los movimientos opositores del país.
La Cumbre del Movimiento de Países No Alineados ha sido otro de los fracasos que en estos tiempos protagonizan los estados totalitaristas del mundo. Su realización no ha pasado de ser una simple reunión formal de cumplido, cual reflejo de la crisis política por la que pasan la mayoría de sus estados miembros, aunque Maduro en sus alucinaciones la vea como un éxito total.
albertorot65@gmail.com
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