Ya está en Estados Unidos el líder cubano Efraín Sánchez Mateo. Por el Dr. Alberto Roteta Dorado.
Tal vez las miradas de periodistas, analistas y reporteros se enfocan hacia ciertos sucesos, los que sin dejar de ser importantes y hasta parte de la vida y de nuestra historia, con frecuencia adquieren ciertas dimensiones realzadas a partir de ciertos aires de sensacionalismo. Esto hace que algunos hechos, a pesar de su importancia, se dejen a un lado, de ahí que desconozcamos las múltiples acciones terroristas que tienen lugar en el continente africano, y paradójicamente podamos estar al tanto de la enorme lista de barrabasadas de un presidente de América Latina muy de moda en estos tiempos.
Es por eso que en aquellos turbulentos días en los que ocurrían acciones trascendentales protagonizadas por cubanos en Quito, la capital ecuatoriana, muy pocos escribieron sobre estos sucesos. Tal vez no tuvieron la percepción intuitiva ni la visión previsora que les permitiera valorar la inmensidad de estas acciones y sus infaustas consecuencias.
“Faciliten nuestra salida de Ecuador para llegar a Estados Unidos”, titularon los 1668 migrantes que en representación de la comunidad cubana en Ecuador, a un documento dirigido a José Serrano, Ministro del Interior del Gobierno de Ecuador, siendo esta solo una de las múltiples acciones de tuvieron lugar entre mayo y julio pasados en la capital del país andino.
El lunes 4 de julio centenares de cubanos marcharon y se concentraron frente a la Embajada de Cuba en Ecuador, no solo para protestar contra las palabras de la nota de prensa que publicara esta entidad en su contra; sino para pronunciarse abiertamente contra la dictadura comunista cubana y su gobernante Raúl Castro.
Luego de varias horas en espera de que algún funcionario saliera y ofreciera explicaciones, decidieron pasar a través de sus puertas un documento dirigido al Embajador de la República de Cuba en el Ecuador, lo que constituye la respuesta de la comunidad cubana a dicha nota de prensa. El joven cubano que protagonizó este suceso ha llegado el pasado 5 de octubre a Estados Unidos.
Pasando las fronteras de varios países centroamericanos durante una larga y peligrosa travesía, al fin, Efraín Sánchez Mateo, un joven de solo treinta años, junto a su esposa y sus padres, está en Houston, Texas, y accede a ser entrevistado para Cuba, Democracia y Vida.
- 1-Usted fue detenido y trasladado desde el parque El Arbolito, en la capital de Ecuador, hacia una de sus prisiones. Se ha dicho que se le realizó un juicio sumario y sufrió cinco días de prisión y una multa. ¿Pudiera referirnos sus experiencias de estos días?
“Fue una experiencia inolvidable pues sentí lo mismo que cada cubano que ha sido encarcelado por el régimen castrista, sentí la impotencia, la falta de recursos en materia de derecho y justicia, desamparo constitucional, todo por pedir libertad, democracia, por decir la verdad y sobre todo no estar de acuerdo con el gobierno y su política corrupta. Recibí los mismos maltratos, golpes, amenazas, intimidación, violación de los derechos humanos fundamentales por la condición de hacinamiento al que fuimos sometidos durante las primeras 24 a 48 horas. Permanecí incomunicado por dos días y medio y luego permanecí tres días más en prisión y pagar una multa de cien dólares.
Estuve con presos comunes con delitos de asesinato, droga, robo, violación. Cuatro agentes civiles de la seguridad cubana vestidos de civil el día del operativo intervinieron para extraditarme, recibí la amenaza hacia mi familia y hasta del propio juez que me hizo la audiencia.
Existen pruebas documentales de mi audiencia y la alegación de mi supuesto delito flagrante tal cuál no pudo probarse y utilizaron la declaración de dos oficiales de la policía con rango cómo elemento probatorio de mi delito contraventor para poder separarme de la masa de cubanos e iniciar el proceso de deportación masiva de los mismos, aun existiendo órdenes de libertad”
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2-¿Cuál es la situación real de la comunidad de cubanos de Ecuador según sus apreciaciones, considerando que ha estado directamente viviendo entre ellos, y además ha sido su representante en los momentos más difíciles?
La situación real de los cubanos en Ecuador es la misma que en Cuba, quién no esté de acuerdo con ACURE, Consulado Cubano, Revolución Ciudadana de Rafael Correa, no haya sido legalizado o reconocido cómo profesional antes de los acuerdos entre ambos gobiernos, se convertirá en emigrante de 8 países, además de enfrentar serios peligros contra su vida y la de su familia, otros no tienen dinero para la travesía y están en un abismo al no saber qué hacer, si regresar a Cuba o realizar labores en contra de sus principios para no tener que regresar a Cuba, viviendo siempre con temor a ser deportado”.
“Como siempre los gobiernos comunistas intentan ocultar sus violaciones bajo la apariencia. Respecto a Rafael Correa y a su gobierno de izquierda, le digo que algún día podré denunciar con pruebas concretas las atrocidades cometidas contra la comunidad cubana. Espero que sean juzgados por una corte internacional por las múltiples violaciones a los derechos humanos. Los cubanos que fuimos detenidos y sentenciados por el gobierno de Ecuador fuimos tratados como terroristas. Personalmente fui violentamente golpeado y decenas de cubanos fueron maltratados por cientos de policías antimotines”.
“Salí de Quito como voluntario psicólogo para apoyar a las familias con pérdidas familiares o materiales. Doy gracias a este país – que no necesariamente se debe juzgar por su lamentable gobierno- por darme la oportunidad de colaborar con aquellos que más necesitados estaban.
El Consejo Nacional de Participación Ciudadana y Control Social me aprobó para participar en esta noble labor. Estuve cerca de un mes en estas labores, pero la principal experiencia fue durante la semana que pasé en Porto Viejo, uno de los sitios más severamente afectados por el terremoto”.
“Si, usted está en lo cierto. Ha sido una necesidad. En medio de una situación muy dura, el movimiento se sintió traicionado por su antiguo líder, el que dejando atrás su deber, antepuso sus intereses personales hasta que renunció. Sabía qué muchos estaban siendo engañados con falsas promesas de Peter Borges, el líder anterior, alguien que ocultaba gran parte de la información respecto a las gestiones que se hacían en la embajada mexicana con fines de viajar hacia Estados Unidos”.
“Quiero la libertad para mi pueblo. Quiero que mi país sea libre, que nuestras familias tengan una vida con decoro, que cese la violencia y la represión, que podamos elegir democráticamente a nuestro presidente, que haya libertad de expresión. Deseo muchas cosas buenas para mi país, pero también que se haga justicia a los dictadores Fidel y Raúl Castro y a todos sus seguidores”.
albertorot65@gmail.com
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