El Canal de Roque y el Canal Vía Cuba. Por Alberto Gutiérrez Barbero.
El no navegable Canal de Roque fue construído a principios del siglo XX desde la zona de Jagüey Grande hasta la Bahía de Cárdenas con el propósito de facilitar el drenaje de las llanuras cañeras en el centro de la Provincia de Matanzas.
Durante mi adolescencia lo observé con cierto nivel de agua al transitar algunas veces la Carretera Central entre Jovellanos y Colón. La construcción de ese canal estuvo a cargo del ingeniero Aniceto García Menocal, el cubano que previamente siendo oficial de la marina de guerra norteamericana había diseñado proyectos para canales en Nicaragua y Panamá. Igualmente fue una figura predominante al levantarse el monumento a George Washington en Washington, DC.
El Canal Vía Cuba
Posiblemente también poco recordado sea la intención que hubo de construir el Canal Vía Cuba en 1954. Un canal con capacidad para buques de gran calado que atravesarían el territorio cubano desde la Bahía de Cárdenas hasta la Bahía de Cochinos, acortando la distancia entre los puertos de la costa oriental norteamericana y el Canal de Panamá. Los preparativos preliminares comenzaron mientras Batista era dictador/presidente, aunque la idea se originó muchos años antes. El colosal proyecto jamás fue de gran popularidad entre los cubanos porque implicaba "dividir" el territorio nacional -con una profunda zanja de por lo menos 40 metros de ancho- y se temía que la participación de intereses norteamericanos causaran problemas de soberanía similares a los ya superados con la erradicación de la Enmienda Platt. También preocupaba que se afectara el medio ambiente y por consiguiente la agricultura.
Como si no fuera suficiente las labores de construcción y otros gastos adicionales requerían una cantidad astronómica de pesos -entonces la moneda cubana estaba a la par con el dólar norteamericano- y seguramente habría una fuente más de corrupción oficial. En resumen el Canal Vía Cuba no fue construído por enérgicas campañas y protestas que finalmente desarrollaron una intensa oposición de amplios y diversos sectores de la sociedad cubana. Hoy mirando muy hacia atrás creo que de nada valió que no se construyera ese canal. Debido al costo de su construcción lo que entonces llegara a manos de corruptos funcionarios del gobierno de todas maneras hubiera sido una relativa bicoca, si se toma en cuenta el porqué en 2012 la norteamericana revista "Forbes" señaló al tirano cubano -gran destructor y no constructor- como uno de los mandatarios más ricos del mundo, mientras que otros "históricos" comandantes de la revolución también millonarios habían sido verdaderos "muertos de hambre" hasta 1959. Sin embargo, eso no es todo. Sus vástagos carentes de escrúpulos y mucho más, todavía los imitan tremendamente explotando, robando, etc, sin siquiera importarles la sangre derramada en los paredones, la tremenda represión, la galopante miseria y el resto de lo que ha hundido a Cuba en el abismo. Desde luego, de haberse construído el Canal Vía Cuba el daño causado a la agricultura no podría compararse por ejemplo con el actual muy deteriorado estado de la producción azucarera cubana. Otras terribles realidades son la contaminación en general, la recesión de las costas y la salinidad de las tierras no solamente en la zona donde se proyectó el canal, si no en todo el territorio nacional donde muy bien se ha demostrado y perdura lo funesto de la tiranía castrista. Cordialmente,
albertogutierrezbarbero@comcast.net
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