Entrevista al Abogado José Vilasuso sobre la situación en Venezuela. Por Emiliano Pérez Castellanos.
1)- Emiliano Pérez Castellanos: Prof. Cómo ve la situación de Venezuela.
Abogado José Vilasuso: Vamos bien, no cabe duda. El punto clave es el respaldo mundial a la democracia representada por el señor Juan Guaidó y la A N. Esto en tesituras parecidas no siempre ha sido igual, recuerde Honduras hace unos pocos años. No debemos pues conformarnos con los logros acumulados, aun andando por sendero correcto y positivo; necesitamos fortalecernos aun más mediante el acopio de otros mil factores de toda pinta. Entre ellos claro está se impone consolidar el liderato democrático. ¿Considera a Guaidó el líder democrático del momento? Del momento sin sombra de duda. Aunque para catalogar de líder a ningún político, nadie que piense en serio se debe precipitar. Sólo estamos en el camino, el buen camino.
2)- Emiliano Pérez Castellanos: Amplíe, profe, eso contiene miga.
Abogado José Vilasuso: Mire, la democracia entre tantas posibilidades aventaja al totalitarismo dadas las oportunidades propias que el sistema brinda a todo ciudadano. Nosotros alentamos, fervientemente, a quien posea talla mínima, cualidades para subir a la tribuna, usar un micrófono en estación radial, hacer uso de la palabra y que el pueblo escuche, conozca y decida. Sin embargo a su pesar o pese a ello, la libertad no siempre garantiza el triunfo a los virtuosos como pensaba Danton; sólo les sirve la mesa. Ahí se abre de par en par la competencia, y comenzamos a conocer personalidades, fisonomías, programas, aptitudes. A veces la apertura concede la palma al mediocre, a desconocidos que fallan, o también a malditos y peores, o peores y malditos, hay que reconocerlo o seguiremos en la mamadera de la politica. Otras veces al final de la vereda hacemos bingo, resultado de un juego, y colocamos en tribuna lo mejor disponible. En ese resquicio, opción, se inserta el señor Juan Guaidó figura del momento en Venezuela. El elegido por la Asamblea Nacional está demostrando liderato, manejo bueno de situaciones, conserva serenidad, sin apasionarse, ni precipitaciones, y demócrata de cuna.
En cambio pasando la página los totalitarios, no importan banderas ni signos, monopolizan el poder; lo controlan férrea e inequívocamente, y el capitoste, personaje mesiánico, se yergue con todos los atributos en medio de discursos altisonantes, promesas sin fundamento, escándalos, cerradas ovaciones, estereotipos y suprimiendo de un tajo a quién le haga sombra; nunca baja la guardia. mientras mayores virtudes posean los que rodean al ungido, más rápidamente habrá que eliminarlos.
Es regla del juego; por ejemplo, viene al caso; luego de la muerte de V.I. Lenin, cuando el camarada Stalin entra a la competencia por el poder, entre sus primeras encomiendas figura eliminar a Kamenev, Zinoviev, Bujarin, trío brillante sumados otros posibles rivales, bastantes rivales; listado extenso. Por entonces resultaba que desde hacía rato Bujarin estaba en salmuera, pocos lo sabían, era por haber apodado a Stalin “Genguis Kahn.” Nominativo jocoso de Bujarin qué el “Padrecito de los Pueblos” no podía ni olvidar ni perdonar. Ud sabe Emiliano que, el camarada Stalin poseía memoria de elefante para todo aquel que se hubiese pronunciado de manera poco respetuosa sobre su persona. El pago de Nikolai Bujarin por el chiste tuvo lugar frente al paredón. Otro caso en 1959 Fidel Castro contó para gobernar con el mejor equipo de cerebros disponible en Cuba; desde Pepe Miró Cardona, Felipe Pazos, Rufo López Fresquet, Manuel Urrutia, Raúl Chibás, Levi Marrero, Justo Carrillo; plumas como Andrés Valdespino, Miguel A Quevedo, Mario Llerena, Humberto Medrano; militares pundonorosos a estilo Hubert Matos, Camilo Cienfuegos, Ramón Barquín, etc. Todos terminaron como sabemos: en su ausencia ¿quiénes permanecieron a su alrededor? Armandito Hart, Raúl, y por supuesto El Che, personaje particularmente pintoresco y contradictorio pues con su experiencia guerrillera y estudiante de medicina resultó suficiente para situarlo; primero al frente del tribunal de justicia de La Cabaña, en vez del coronel R. Barquín a quien correspondía constitucionalmente el cargo como jefe del ejército cubano. Más tarde El Che ocupa la presidencia del Banco Nacional sustituyendo a Felipe Pazos talento económico comparable a Alexander Hamilton. Y claro, (y este es el dato imprevisto y desconocido) como El Che era un dirigente más laaaargo y con trastienda más profunda de lo reconocido hasta hoy, (por las opiniones internacionalmente autorizadas) tampoco hizo lo que el Máximo Líder esperaba y terminó en la aventura boliviana de 1967.
En resumen la libertad eternamente dispondrá de reservas generosas, por eso se renueva, su poder descansa en la ley y la constitución; mientras las figuras van y vienen el sistema se mantiene y lo principal, recicla. Richard Nixon a mi juicio gran gobernante y ejecutivo sin cuento. Fue derrocado innecesariamente, pero conforme a la ley. Por ello la democracia no perdió un baluarte; disminuyó poder, hegemonía, ni el liderato y la confianza de la nación americana.
3)- Emiliano Pérez Castellanos: Pregunta, entonces Chávez……..
Abogado José Vilasuso: Hugo Chávez por su parte nunca tuvo apoyo de políticos con fuste y flux; mucho menos intelectuales brillantes a su alrededor; desde los inicios mostraba el sesgo demagogo, personalista, y comido por la vanidad. aunque con un liderato para las masas indiscutible, arrollador. Anuló a Leopoldo López por envidia, adivinaba que en el mano a mano no podría pechar con don Leopoldo. Pero el coronel era atractivo a la plebe, y por saberse flojo para asumir tamañas responsabilidades, acude a quien menos debió acudir, a Fidel. Castro le trasmite su receta y de ahí en adelante todo descansaría en lo que H. Chávez durara en este planeta de los vivos y el petróleo venezolano pudiera comercializarse mediante Pevedsa. Ambos elementos terminaron. Toda fantasía acaba, no perdura. La fantasía siempre tiene alas, las alas se vuelan, y lo peor no retornan al nido. La situación desde el punto del poder sostenible era bastante grave para Venezuela. No obstante ni Fidel, Chávez, (ni otrora Stalin) como iluminados, ungidos, líderes superdotados, etc, pudieron jamás admitir a su alrededor persona alguna provista de cabeza propia, seso no hueco, dignidad, capaz de observaciones, opinar, pensar, discrepar, etc. Chávez había sustituido la empleomanía que desde antaño administró profesionalmente a Pevedsa, por revolucionarios aconsejados por cubanos, y luego por militares. Así cavó su sepultura política en pozo profundo, más temprano que tarde el poder personal, liderato y Pevedsa se enterrarían con el coronel de boina roja en el abismo sin fondo de los interminables mares y océanos de los cinco continentes.
Venezuela poseía y posee cabezas brillantes, plumas, políticos, intelectuales forjadores de opiniones dignas de todo encomio, y voces claras predicando las verdades como templos de Juno a los cuatro vientos. Millones los siguen, basta comprobar las marchas en todo el territorio nacional, la represión salvaje de que son objeto, y sumar los muertos, heridos, mutilados, presos de conciencia, exilados, desesperados, hambrientos, niños desnutridos, enfermos y moribundos de toda ideología y partido, hasta chavistas y por supuesto cada vez mayor número de socialistas, como acaba de señalar esa pluma exquisita del periodismo continental Miguel Otero Silva. “Las barriadas que se desbordan de inconformes son ahora las mismas que otrora identificamos como oficialistas.” Entre tanto desde Miraflores la cabeza del poder es un estólido sin otra mira que ganar tiempo en espera indefinida de la parálisis perpetua de la sociedad venezolana al par con el mundo exterior roncando. Para ello se apoya en los beneficiarios del gobierno, alabarderos, confidentes, restos de Pevedsa, reservas póstumas de oro, tropas cubanas, y fuerzas armadas venezolanas a cada hora más conscientes de su deber con el pueblo del que a fin de cuentas forman parte, otra señalada observación de don Miguel en El Nacional, de Caracas.
Ah, pero la estaca atravesada en el pavimento de brea merece ligero análisis, de lo contrario seguiríamos en el pueblo sin ver las casas. Nicolás Maduro nace a la política en Cuba, desde 1980 se refiere entre los cuadros sindicales del marxismo leninismo, su oficio chofer de ómnibus. La carrera se desarrolla a buen paso y su primera aparición internacional arrea con las las encomiendas de Hugo Chávez en la crisis hondureña del año 2009. Rápidamente asciende hasta la cúspide y una vez desaparecido el coronel boina roja, Maduro asume el liderato revolucionario secundado por Diosdado Cabello insolente, narco y amenazante por costumbre y autonomasia. Es creíble y razones sobreabundan para aceptar la versión sostenida de que para reemplazar a Chávez, Fidel Castro eligió un personaje formado de rancia estolidez. De tal guisa se aplicaba rigurosa y fielmente la regla de juego cual clave de poder desde tiempos stalinistas; cociente de inteligencia inferior a mediano, obstinado hasta los tuétanos, estrechez porosa cerrando la entrada de oxígeno; factores que arrojan un carácter férreo, tozudo e impenetrable ante toda señal flexible, lógica o sentido común. Fidel Castro a quien no debe negarse agudísimo instinto de poder, y sobrado liderato, no podía fallar en la elección idónea para garantizar su doble sucesión La Habana, y Caracas. Mucho antes de brotar signos iniciales de la debacle venezolana, Castro había predicho la extinción del sistema, ejemplos sobran, es hora de hacerlos relucir. Revísese su mensaje de despedida al senador “Jesse Helms, North Caroline.” Castro textualmente reconoce el fin del sistema, cito; the future belong to you, el futuro es de ustedes, termino la cita.
Resaltantemente la ingenuidad o mejor el angelismo del coronel cariredondo y boina roja desde la cuna superaba por varios dígitos al colega Salvador Allende durante el siglo precedente. Los jugosos subsidios venezolanos desde un principio entraban en Cuba tan a chorros, como a chorros tirados por la ventana. Intentar contener el despilfarro nada lograría, una más corta o menos larga agonía, final idéntico. Desde la caída del muro berlinés en 1989, y surgimiento de la revolución de terciopelo, para Fidel Castro la historia había terminado. Improvisaciones son improvisaciones. De ahí el reciente llamemos “”consejo”” del embajador cubano en Caracas; resistir, resistir, resistir. Toda negociación, modificaciones, flexibilidades se acompañarían de cambios, pérdida de control, despertar de dormidos, y por último la apertura. Perestroika y glasnost eran palabras rusas escritas en alfabeto cirílico no bienvenidas en la cúpula fidedelocastrista habanera. O sea el ocaso de una era única acomodada a su ego y perfil ajustado de tirano bien hecho. Fue necesario estirar las cuerdas todo lo más que dieran, elásticos hasta reventar. Por ahí andamos hoy y veremos quién recoge las velas, migajas y restos de escombros en el basurero. He ahí la explicación somera de por qué Nicolás Maduro enmarca sin rival la sucesión del poder castrista en el satélite venezolano.
4)- Emiliano Pérez Castellanos: Bueno, ahora póngame al día con algo más reciente. Noticia en caliente.
Abogado José Vilasuso: Manos a la obra, juzgue usted. Hace algún tiempo ese expositor de la verdad publicitaria que se llama Jaime Bayly sugería que elementos poderosos estarían interesados en cambios drásticos incluso deponer a Maduro. Desconozco si don Jaime citó algún protagonista del plan. Una cosa u otra, mediante el portal: Cuba democracia y vida. org, acabamos de enterarnos de sostenidos contactos primero indirectos y directos después entre representantes del gobierno interino de Venezuela con portavoces tanto chinos como rusos. Conversaciones entre gobiernos soberanos. Era de esperarse. Pocos pueden sentirse más preocupados al par de mejor enterados de la precaria situación gubernamental venezolana que sus socios más estrechos. Téngase presente, se trata de dos potencias capitalistas que, si bien se embarcaron en aventuras típicas de sus tiempos idos, la realidad patética de los hechos les confirma y refuerza la sabiduría luminosa otrora liberadora de un cáncer terminal. Solamente a China se le deben alrededor de unos veinte mil millones que, no son pocos, pero buenos. Rusia anda por mismos o cercanos rumbos, las recientes demandas rusas para el cobro de deudas a como dé lugar; oro en lingotes, en moneda, como sea, no dejan margen de duda tanto de la insolvencia madurista, como del hastío en la duma a voz en cuello, y a sotto vocce en el Kremlin. Los asociados no presumen, ni barruntan saben que Maduro no pagará, para algo Hugo Chávez quemó las naves. Consecuencias se palpan ahora. Para colmo nos hallamos en los preliminares de las medidas cautelares más drásticas aplicadas a todo efectivo, divisas, crédito, pieza de trueque, depósito bancario, cuenta pendiente de cobro en que aparezca envuelto el régimen madurista. En otras palabras, las tuercas aprietan y de aquí en adelante la verdadera parálisis comienza.
5)- Emiliano Pérez Castellanos:Y ¿Bayly?
Abogado José Vilasuso: A propósito de Jaime Bayly. A la vista quedaron señales positivas del liderato promisorio del señor Juan Guaidó entablando acercamientos, y haciendo pública su política de entendimiento con China y Rusia; así dejaba claras sus intenciones y despejaba el ruedo de enemistades, distanciamientos e incomprensiones. Obviamente para los acreedores es más conveniente negociar con la oposición que con la dictadura caraqueña. Nada de esto resulta un descubrimiento. En negocios todo hombre de muchos números sigue el rastro, percibe el olor de quién le pueda presentar sus cuentas, a esa hora no hay amigo o lo opuesto; se pone a prueba el oficio, instinto pragmático del gran cobrador. Lo novedoso resulta que ya comenzamos a recibir señales inocultas del otro lado reflejando sentido común, madurez política, y la fuerza incontenible de las cifras laaaaargas y muchos ceros a la derecha, aplastando verborrea, mesianismos, y giros izquierdosos latentes en Latinoamérica, pero de capa caída en lo que previamente fueran los grandes imperios tras la cortina de hierro. Y para esos navegantes repitiendo la vieja consigna aplicada a Juan Guaidó de marioneta del imperialismo yankee, no veo respuesta que mejor les cuadre. (FIN).
poetamedioloco@yahoo.com
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