Manuel Marrero, designado como primer ministro de Cuba Díaz-Canel dice que 'la propuesta' fue aprobada antes por el Buró Político del Comité Central del Partido Comunista. Diario de Cuba 21 de diciembre de 2019
Manuel Marrero Cruz fue "elegido" por la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), tras ser designado por Miguel Díaz-Canel, como nuevo primer ministro de Cuba, un cargo que el Gobierno restituye tras más de 40 años de haberlo abolido.
De 56 años, Marrero Cruz, quien se ha desempeñado como ministro de Turismo durante 16 años, fue el único candidato propuesto por Díaz-Canel, y como suele suceder, la ANPP lo "votó" por mayoría.
El gobernante dijo para fundamentar su propuesta que el diputado posee "una amplia trayectoria y cualidades para integrar el Consejo de Ministros."
Arquitecto de profesión y, según indicó Martí Noticias, de grado militar coronel, Marrero Cruz fue uno de los ministros de Raúl Castro que Díaz-Canel ratificó en 2018, año en que fue elegido como diputado a la ANPP. No obstante, su designación en la cartera ministerial se produjo bajo el régimen de Fidel Castro.
Anteriormente, había sido inversionista del grupo hotelero Gaviota, subdirector y director general del hotel Río de Luna, así como subdelegado para las provincias orientales de la propia empresa.
En 1996 fue designado director general del complejo hotelero Varadero Azul y en 1999 promovido a vicepresidente primero de Gaviota, del que fue presidente en 2001, tres años antes de convertirse en ministro de Turismo.
Al ser Gaviota una empresa propiedad del conglomerado de los militares GAESA, dirigido por el exyerno de Raúl Castro, Luis Alberto Rodríguez López-Callejas, que administra la mayor parte de ese sector en la Isla, su elección podría significar una mayor presencia de estos en el eje del poder del Estado.
De acuerdo con la nueva Constitución, redactada bajo la tutela del Partido Comunista, el primer ministro, que será el jefe de Gobierno por un plazo de cinco años, dirigirá las sesiones del Consejo de Ministros o de su Comité Ejecutivo, supervisará el trabajo de los gobernadores provinciales, controlará el desempeño de los organismos de la Administración Central del Estado y de las entidades nacionales, entre otras funciones administrativas.
Al hacer la propuesta, Díaz-Canel aseguró que Marrero Cruz "se ha caracterizado por su modestia, honestidad, capacidad de trabajo sensibilidad política y fidelidad al Partido y a la revolución", indicó el sitio oficial Cubadebate.
También dijo que el nuevo primer ministro ha conducido de manera destacada el sector del turismo, una de las principales líneas del desarrollo de la economía nacional, al tiempo que ponderó su experiencia en negociaciones con contrapartes extranjeras y la participación en eventos internacionales, "demostrando su habilidad, firmeza y dotes para la interlocución".
Díaz-Canel añadió que la propuesta de Manuel Marrero como primer ministro fue aprobada anteriormente por el Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
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Díaz-Canel nombra al coronel Manuel Marrero como primer ministro 14ymedio 21 de diciembre de 2019
Al frente de la cartera de Turismo desde 2004, su nombre apenas se manejó en las quinielas populares previas a la designación del cargo
La sorpresa ha marcado la designación del primer ministro cubano este sábado. Ni mujer ni mestiza, el elegido para el nuevo cargo es un coronel de 56 años con una barba que recuerda los tiempos de los guerrilleros bajados de la Sierra Maestra. Manuel Marrero Cruz, ministro de Turismo desde 2004, ocupará a partir de este sábado el segundo puesto del poder ejecutivo.
El nombre de Marrero apenas se manejó en las quinielas populares previas a la designación del cargo. Antes de entrar en política, este arquitecto fue jefe del grupo técnico de inversiones, subdirector y director general del hotel Río de Luna y luego subdelegado de la empresa militar Gaviota para las provincias orientales.
Este sábado, la candidatura única de Marrero para el cargo "recibió la votación unánime por los diputados del Parlamento, reunidos en el salón plenario del Palacio de Convenciones de La Habana", publicó la prensa oficial.
Por décadas, Marrero trabajó en el entramado militar que controla el sector clave del turismo. En 1999 llegó a la vicepresidencia del Grupo de Turismo Gaviota y, en 2001, a la presidencia. En 2017 recibió el Premio Excelencias Turísticas por su trayectoria personal y laboral.
Marrero recibió ese premio por haber "llevado a cabo numerosos proyectos en el sector (turístico), que se ha transformado en uno de los motores fundamentales de la economía cubana".
Con reputación de ejercer un mando despótico, Marrero también es recordado de manera muy crítica por el mensaje que publicó en las redes sociales pocas horas después de que un tornado afectó el pasado 27 de enero a varias zonas de La Habana. "Hemos realizado un recorrido posterior al evento meteorológico ocurrido en nuestra capital en la noche de ayer. Todas las instalaciones turísticas se encuentran operando, pues no han sufrido afectaciones", tuiteó entonces.
"Es inepto y se rodea de ineptos", asegura una ex empleada de Turismo que conversó con 14ymedio y que prefirió el anonimato. "Es de esa clase de jefes que le gusta hacerle saber a los subordinados que está siempre por encima de ellos y que si lo contradicen les puede fastidiar la vida". La trabajadora, que escaló puestos altos en el ministerio, que hasta hoy lideró Marrero, lo cataloga como alguien que "antepone el beneficio personal y el de sus amigos, por delante de lo que pueda beneficiar al turismo en Cuba."
Otras fuentes consultadas coinciden con que "es alguien sin voz ni voto, lo que le digan desde arriba lo hace y mientras no le dicen nada se dedica a beneficiar a socios poderosos". Un trabajador, que estuvo muy cerca lo define brevemente: "ese nunca dice que no cuando lo llaman del Consejo de Estado pero pocas veces tiene un sí cuando sus empleados le piden algo".
Este hombre de pocas palabras ha tenido un aumento de sus apariciones públicas en el último año debido a las sanciones estadounidenses que han golpeado duramente el turismo hacia la Isla. A inicios de diciembre anunció que la cifra de viajeros que habían llegado a Cuba en 2019 apenas había superado los 4 millones, lejos de los 5 millones planificados para este año.
Según la Carta Magna, en su nueva función Marrero atenderá y controlará el desempeño de los organismos de la administración central del Estado, de las entidades nacionales y las administraciones locales. Además, estará facultado para asumir, con carácter excepcional y temporalmente, la dirección de cualquier organismo estatal.
Entre los seis viceprimeros ministros que acompañarán a Marrero en su labor destacan por la vieja guardia el histórico Ramiro Valdés y cuatro de los nombres que se manejaban en las especulaciones populares: Inés María Chapman, Roberto Morales Ojeda, Jorge Luis Tapia Fonseca y Alejandro Gil Fernández, además de Ricardo Cabrisas.
Su cuenta de Twitter revela mucho de la proyección pública de Marrero. Comparte mensajes de Miguel Díaz-Canel, consignas que reafirman "la continuidad" de la nueva generación de funcionarios en relación con sus predecesores y da amplia cobertura a frases dichas por Raúl Castro.
En las biografías de posibles candidatos al puesto que este diario había compartido esta semana, el nombre de Marrero no aparecía. En las calles se barajaban otros nombres, especialmente el de Inés María Chapman y Roberto Morales Ojeda.
En la sesión parlamentaria de hoy, Miguel Díaz-Canel propuso también designar seis nuevos ministros: Marta Elena Feito Cabrera para Trabajo y Seguridad Social; Juan Carlos García Grada para Turismo; Martha Sabina, ministra-presidenta del Banco Central de Cuba; Jorge Santiago Sobrino Martínez, encargado de la Industria Alimentaria; Eloy Álvarez Martínez para Industrias, y Nicolás Arrente Cruz a Energía y Minas.
Además, Díaz-Canel designó como secretario del Consejo de Ministros al general de brigada José Amado Ricardo Guerra.
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