Testimonio de la esposa y la hija de José Daniel Ferrer, trás visita familiar.
Por UNPACU el 5 de diciembre de 2021

DICTADURA DE RAÚL CASTRO Y MIGUEL DIAZ CANEL ESTÁ ASESINANDO DE MANERA VIL, PREMEDITADA Y  EXTREMADAMENTE CRUEL AL PRESO POLÍTICO JOSE DANIEL FERRER GARCIA.
Por Ana Belkis Ferrer en Facebook el 6 de diciembre de 2021

Soy Ana Belkis Ferrer Garcia
El Viernes día 3 de Diciembre sobre las 5:00 pm tuvo lugar en la prisión de Mar Verde, Santiago de Cuba, la segunda visita familiar al prisionero político José Daniel Ferrer Garcia,  líder de la Unión Patriota de Cuba (UNPACU), durante casi cinco meses de injusto, inhumano y criminal encierro solo ha recibido dos visitas familiares.

La dictadura determinó impedir el encuentro con su padre, a José Daniel Ferrer Cantillo, como castigo y venganza por participar en la manifestación pacífica del 15/11. Permitieron la entrada a Nelva Ismarays Ortega Tamayo, esposa de José Daniel, su pequeño niño Daniel José y a Fátima Victoria Ferrer Cantillo, hija de 17 años de edad, a José Daniel siempre lo llevan esposado hasta la pequeña oficina donde dan la visita, en esta ocasión no lograron quitarle la esposa de una de sus manos, los sicarios Castristas usaron todo tipo de llaves y  no lograron abrirla, todo el tiempo permaneció esposado.

Tanto Fátima Victoria como Nelva Ismarays manifiestan que José Daniel se encuentra muy delgado, demacrado y físicamente deteriorado, mucho más que en la visita anterior, el día 4 de Noviembre. La dictadura Castro Canel comunista le está haciendo de todo con el propósito de quebrantar su voluntad y destruirlo tanto fisica como psicológicamente.

José Daniel continúa en la misma celda de aislamiento, semi tapiada desde finales de Octubre que la dictadura determinó abrir una pequeña ventana en una de las paredes, trás haber estado cuatro días en huelga de hambre exigiendo ser trasladado a una celda con ventilación a raíz de que se le imposiblitaba respirar, entre cuatro paredes blancas con un bombillo encendido las 24 horas del día, bajo torturas físicas y psicológicas constantes y permanentes, semidesnudo, su cuerpo lleno de picaduras de mosquitos, no tiene donde amarrar un mosquitero para protegerse de los agresivos insectos, presenta sangrado bucal, fuertes e insoportables dolores de cabeza, insomnio, zumbido ensordecedor en los oídos los cuales identifica como sonido de grillos, parálisis y temblores momentaneos en sus manos, enfriamiento de su cuerpo, perdida de la visión, tos, además de los problemas de salud contraídos durante anteriores encierros, como son hipertensión arterial, gastritis crónica y úlcera duodenal, sin atención médica ni medicamentos apropiados, solo le brindan el  Psicofarmaco nombrado Alprazolan, el cual le suministraron durante determinado período de tiempo sin hacerle saber que es muy potente y puede causar ideaciones paranoicas y suicidas, pésima y escasa alimentación y limitación de los alimentos que la familia logra encontrar y permiten llevarle una vez al mes.

De 18 naranjas dulces solo permitieron pasar 10, los jugos son limitados, tampoco permitieron un pomo de miel. De los medicamentos llevados impidieron pasar un pomo de Vitamina E, uno de acetaminofen y dos de Omeprazol, así como las ropas blancas, persisten en ponerle una "P" de preso, a lo que José Daniel se niega.

Totalmente incomunicado del resto de la población penal, sin ver un rayo de sol, excepto en tres ocasiones, le niegan el derecho a tener lápiz y hojas por lo que aún no ha podido solicitar asistencia religiosa, solo le permiten tres libros, habían dicho que permitirían periódicos y también negaron su entrada.

Todos los Viernes le hacen un mitin político de repudio, desde los respectivos  destacamento tocan  tambores y gritan consignas comunistas de odio, desprecio  y amenazas contra los presos políticos, el día 15 de Noviembre fué de mayor magnitud y José Daniel respondió con otros cuatro días en huelga de hambre.

En dos ocasiones ha sido amenazado por el mayor de apellido Ortiz, jefe de orden interior con ser golpeado por exigir sus derechos.

Hace aproximadamente dos meses determinaron darle cinco minutos de llamada telefónica semanalmente, durante tres semanas le impidieron dicho derecho por haber denunciado la terrible situación en que permanece, posteriormente le han disminuido el tiempo a cuatro minutos y el pasado Viernes lo redujeron aún más, solo permitieron 3 minutos con 15 segundos.

José Daniel resume la preocupante y cruel situación en que lo mantienen, dónde no descarta la aplicación de radiaciones sónicas, como enterrado vivo y muriendo lentamente, manifestando durante la visita de este día 3 que no sabe si para la próxima visita lo encontrarán vivo o muerto, no sabe cuánto tiempo más su organismo podrá resistir.

A pesar de tan abversa y lamentable situación comenzo jornada de ayuno el día 1ro del presente mes, por el respeto a los Derechos Humanos en todas los países bajo el yugo de tiranias, la cual extenderá hasta el día 10.

Pedimos a los gobiernos democráticos, instituciones y personas amantes de la justicia, la libertad y el derecho a la vida que intercedan lo antes posible por José Daniel, para evitar otro desenlace fatal en nuestra amada y sufrida tierra, pedimos intercedan  por todos los presos políticos para impedir que adopten medidas de torturas extremas contra todos y cada uno de ellos, como las que están implementando hace 149 largos y duros días contra  José Daniel.