«Muchas personas brillantes creen que las ideas mueven montañas. Pero las excavadoras mueven
montañas; las ideas muestran dónde deberían ir las excavadoras a trabajar». Peter Drucker
Peter Drucker
Ingeniero Químico Roberto L. Capote Castillo.- 29- marzo- 2024. Los integrantes de la cúpula castro-comunista distan mucho de ser brillantes, pero están convencidos de que las ideas mueven montañas, llegaron al “non plus ultra” de querer dominar la naturaleza. El “estúpido en jefe” pretendió secar la Ciénaga de Zapata para sembrar arroz, sin valorar el daño ambiental al mayor humedal del Caribe, otra de sus alocadas ideas.
Desde los inicios del año 1959 el “Destructor en jefe” tenía la visión de ser dictador de un país comunista y para esto confiscó las principales empresas capitalistas defenestrando a todos los empresarios y directivos. La mayoría de este personal eligió la emigración creando nuevos negocios en Miami, su principal destino. Este capital humano fue sustituido por los revolucionarios fieles al nuevo líder, con pocos o ningún conocimiento sobre gestión empresarial y faltos de materia gris. La realidad ha demostrado que hay una proporcionalidad inversa entre comunismo e inteligencia, mientras más comunista es una persona mayor es su carencia de talento.
Un hecho importante, y quizás muchos desconozcan, es que Karl Marx no propuso el modo en que debían organizarse el Estado y la economía socialista, una vez que los proletarios conquistaran el poder, esto ha causado interpretaciones muy diversas. El experimento más importante fue el socialismo real término usado por Leonid Brézhnev para diferenciarse de países socialistas con otras tendencias y que sus satélites del Segundo Mundo trataron de imitar. Todo fue un rotundo fracaso, aunque su fundamento era el Marxismo.
Desde el lanzamiento de la teoría del modo de producción propuesto por Marx y Engel recibieron críticas tales como la falta de incentivos en el trabajo, al estar hablando de sistemas igualitarios. También la pérdida de libertad económica, pues los sistemas propuestos no permiten la libertad para la iniciativa privada. Además, a los críticos les preocupaba la concentración del poder en manos del Estado que pierde la sociedad, su incapacidad para controlar los precios de todos los recursos, bienes y servicios, la inadecuada asignación de recursos y otras reprobaciones formuladas por estudiosos del tema. El modo de producción que proponía Marx, basamento de la economía socialista, se destaca por la abolición de la propiedad privada. Su teoría establece otras características que son las siguientes:
- -Propiedad colectiva.
- -Sistemas igualitarios.
- -Igualdad económica, social y política.
- -Supresión de la competencia.
- -Economía planificada.
- -Fijación de precios.
- -Control económico total y absoluto.
- -Trabajo y salario en función de las necesidades.
A continuación, analizaré de forma resumida cada una de las características anteriores en el contexto de la economía socialista cubana que las ha aplicado según su conveniencia y provecho. Es mi propósito mostrar que el modo de producción socialista en la variante castro-comunista también ha fracasado.
Propiedad colectiva.
Desde sus inicios en el año 1959, antes de declararse socialista, el “Destructor en jefe” había comenzado la eliminación de la propiedad privada, empezando con la confiscación de los falsamente catalogados “bienes malversados” y luego continuó con las empresas extranjeras y nacionales. La historia es conocida y este proceso culminó el 13 de marzo de 1968 con la “Ofensiva Revolucionaria” que eliminó las pequeñas empresas que habían sobrevivido. Según la teoría socialista con estas acciones el gobierno busca el bienestar de la sociedad. No obstante, para hacer la historia corta, actualmente Cuba es el país más pobre de Latinoamérica con un 72% de pobreza luego de haber sido uno de los más prósperos de la región. La nueva clase castro-comunista se ha robado las propiedades y riquezas “malversadas” viviendo como millonarios y los proletarios “los verdaderos dueños”, cada día se sumen en una mayor miseria y aún no son propietarios.
Sistemas igualitarios.
Todos los sistemas existentes en el castro-comunismo proclaman ser “igualitarios”, sin embargo, en la práctica ninguno lo es pues la “casta de dirigentes” en sus diferentes estratos: Partido, gobierno, ministros, empresarios, etcétera, disfrutan de desiguales privilegios según sea su rango, verbigracia, hospitales especiales, tiendas, salarios, viajes al extranjero, vacaciones, coches de alta gama y una larga lista que todos los cubanos conocemos. Nunca logré ver, ni en los mejores momentos de la economía, a algún dirigente comprando en un mercado agropecuario o en la tienda con libreta de racionamiento, aunque tenía vecinos pertenecientes a la casta pues mi casa, heredada de la familia de mi esposa, que fue adinerada y le confiscaron todas sus propiedades, estaba en uno de los mejores repartos de la ciudad y éramos los únicos dueños originales pues el resto las habitan miembros de la “nueva clase” después de emigrar sus dueños. Los seres humanos poseen diversas cualidades físicas, mentales, intelectuales, etcétera, que nos hacen diferentes y únicos. Es irracional la utopía de la igualdad, aunque es mi criterio que es una coartada comunista para la corrupción de sus dirigentes. No hay mayor desigualdad que la igualdad.
Igualdad económica, social y política
Esta característica está muy relacionada con la anterior, no se ha logrado que ninguna sociedad actual funcione correctamente con plena igualdad económica (similares niveles de vida); tampoco socialmente igualitarios por los diferentes conjuntos de personas con características semejantes y que están ubicadas en un sitio o lugar similar dentro de la jerarquía social, verbigracia, religión, etnia, poder económico, intelectuales, militares, etcétera; ni políticamente porque cada ciudadano es libre para identificarse con la ideología que desee. Esta característica la procuran cumplir por medio de la desacreditada “dictadura del proletariado” que en Cuba la intenta aplicar, infructuosamente, la monárquica dictadura castro-comunista, que de proletarios no tienen nada.
Fui investigador de la Academia de Ciencias (ACC) y conocí a un joven doctorado en física (miembro junior de la Asociación internacional de física). Los resultados de sus investigaciones sobre la programación de sistemas dinámicos no lineales motivaban que viajara frecuentemente hasta que la rectoría de la universidad, donde era profesor con la mínima categoría (instructor), impidió sus salidas. Además, no disponía de ordenadores con las capacidades requeridas para sus investigaciones obligándolo a trabajar de madrugada. Tampoco tenía vivienda y vivía en calamitosas condiciones en un albergue universitario. Actualmente es un destacado investigador en Brasil donde vive en un penthouse, según un amigo común que lo visitó en ese país. ¿Cuál es la opción de la sociedad en la economía socialista para encarar esta característica? La malversación, el robo, la corrupción y la emigración. De lo contrario finalizar en la miseria.
Se comenta y escribe poco sobre la vida poco comunista de Karl Marx. Tenía criadas a una de las cuales embarazó y Engels se responsabilizó, para preservar el prestigio del “iluminado”. Además, estaba colmado de deudas y despilfarraba el dinero en alcohol y burdeles. Se unió al “Club de la Taberna de Tréveris”, una asociación de bebedores de la que fue su presidente. El comportamiento del pensador que clamó contra la opresión y defendió a las clases obreras más desprotegidas fue muy poco coherente con las ideas de igualdad e integridad que propuso y fundamentó. Todos los dictadores comunistas del “Segundo Mundo” y otros muchos de la “nueva clase” cubana imitaron su comportamiento.
Las actuales “jineteras” tuvieron como precedente la “titi manía” de los dirigentes castro-comunista que tenían jóvenes y agraciadas amantes a las que colmaban de beneficios como casa, autos, viajes al extranjero, vacaciones, etcétera. Cerca del centro de información científico de la ACC, en la que fui investigador, se le entregó una casa a la amante del segundo secretario del partido de la provincia y por las protestas de los militantes del partido la mudaron a otra. Con este dirigente partidista coincidí, en los años ochenta, en el Hotel Deauville y estaba acompañado por una joven muy hermosa que podía ser su hija, él vestía ropa juvenil de marca que aún no se conocían en Cuba. ¿Esto es igualdad al estilo de Marx? “Haz lo que digo y no lo que hago”.
Supresión de la competencia.
En el universo empresarial la productividad, eficiencia y rentabilidad son claves para el éxito de las empresas. La revolución científico técnica indujo un cambio radical de las fuerzas productivas de la sociedad creando posibilidades para el crecimiento de la producción y la creciente competencia en el mercado. Las empresas se enfrentan constantemente al desafío de optimizar sus recursos y maximizar los resultados. Este fenómeno también dio un considerable impulso a la competencia entre las empresas para ofrecer productos y servicios más novedosos, con mayor calidad y a menores precios. Según Marx en la sociedad burguesa-revisionista la ciencia y la técnica operan en el marco de las leyes de la sociedad capitalista, por eso se transforman en lo opuesto a su verdadera naturaleza. Marx ponía de manifiesto que esta enajenación se expresa asimismo en la separación de la ciencia del obrero productor, que, de esta manera, se convierte en «una potencia intelectual en sí». Otro delirio del presidente del “Club de la Taberna de Tréveris”.
Las ciencias, excepto las políticas, son neutras pues no tienen ideología, no se puede inventar un nuevo equipo a lo comunista o a lo capitalista, tampoco es posible trasplantar un corazón conforme a la ideología del país donde se realice. El “estúpido designado” se cree científico, porque le regalaron un doctorado, y siempre está “conferenciando” sobre la importancia de la ciencia e innovación revolucionaria. Verbigracia, cree que el arruinado sistema eléctrico cubano renacerá con científicos, trabajadores e innovadores revolucionarios en lugar de su reconstrucción radical para lo que carece del capital necesario por estar en bancarrota y no tener credibilidad de los inversores. Lo único que hace él y sus acólitos es prometer soluciones que ya nadie percibe viable.
Este propósito de suprimir la competencia ha provocado que, en la actual coyuntura de las MiPymes y mercados agropecuarios, no exista competencia y establezcan precios oligopólicos. El oligopolio es un mercado donde sólo unos pocos competidores tienen la capacidad de influir en el mercado, y por tanto en el precio de los productos o servicios. Los oligopolios tienen la desventaja de la reducción de la calidad y la falta de competencia. Se establece un acuerdo anticompetitivo entre las empresas que adoptan prácticas oligopólicas que es ilegal en muchos países. Esto lo permite el castro-comunismo porque la mayoría de las MiPymes son negocios propiedad de testaferros de la cúpula dirigente o sus descendientes, como el reciente caso del defenestrado ministro de economía.
El propietario de una micro, pequeña y mediana empresa (MIPYME) ha sido detenido por presuntos
vínculos con el destituido exministro cubano, Alejandro Gil, en medio de una investigación
sobre posibles actos de corrupción.
La competencia entre las empresas es una importante motivación para desarrollar la I+D+i y crear nuevos productos o servicios así como mejorarlos. Actualmente los proletarios de los países capitalistas tienen mejores niveles de vida, respecto a la época de Marx, pues al aumento del salario real se añade mejor calidad de los productos y servicios que pueden obtener, además de la disminución de los precios que es beneficioso para la sociedad y la economía pues reduce la inflación que el estúpido designado no sabe como controlar.
En el próximo artículo continuaré analizando las características del modo de producción que proponía Marx en la versión castro-comunista.
 capotecastillo@yahoo.es
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