Bancos sin efectivo, cajeros vacíos y apagones impiden cobro de salarios en Cuba. Por Ivette Pacheco. RTV Martí. 

La escasez de efectivo en los bancos cubanos es una constante, pero la situación que se agrava con las interrupciones del servicio eléctrico.

Esta realidad genera preocupación entre quienes buscan acceder a sus salarios tras un mes de trabajo, y afecta especialmente a jubilados y personas con discapacidad que enfrentan dificultades para cobrar sus pensiones.

René Lozano, residente en Morón, Ciego de Ávila, describe la situación en el Banco de Crédito y Comercio (Bandec) de su localidad. La imposibilidad de retirar dinero cuando es necesario ha propiciado la aparición de individuos que cobran hasta 300 pesos cubanos por un turno en las filas.

"Yo no he podido sacar dinero de la jubilación mía, nada. Porque son 80 o 100 números y tienes que ir por la madrugada. Y para conseguir un numerito de esos tienes que pagar a la gente que vaya a hacer cola toda la noche, y te lo venden en 300 pesos", afirmó Lozano.

El proceso de bancarización, anunciado en 2023, tenía como objetivo la modernización del sistema financiero, la reducción de la escasez de efectivo y las aglomeraciones en los bancos, así como la optimización de la circulación del dinero. Sin embargo, el plan fracasó debido a la falta de una infraestructura adecuada, las fallas en el sistema energético y la persistente escasez de efectivo.

"La semana pasada, cuando yo vine, muchos nos tuvimos que ir, nos tuvimos que retirar, porque no habían depositado el dinero, porque no hay dinero en efectivo, como tal, en el Banco", comentó Medina.

Desde Santiago de Cuba, la activista Lizandra Rivera describió cómo enfrenta esta problemática en los bancos de la ciudad, en la región oriental del país.

"Una de las provincias que más problemas tiene con los cajeros es Santiago. Nunca hay dinero en el cajero, la gente tiene que amanecer, la venta de los turnos y es toda una locura. Te pasas el mes entero trabajando y, ejemplo, tu salario es de 3,000 o 4,000 pesos, y muchas veces nada más se puede sacar 1,000", explicó Rivera.

La activista añadió que, para cobrar la pensión de su abuela, regularmente debe ceder el 10 por ciento del monto a una persona que realiza estas gestiones. "Sí, yo la tarjeta se la entregué a un muchacho que me saca el dinero y a quien tengo que darle el 10 por ciento del dinero. El que no tiene [dinero], la miseria, se lo come", indicó.